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María Isabel González Ingelmo, Directora del Centro de Referencia Estatal de Atención a Personas con Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias en Salamanca (IMSERSO), nos habla, entre otras cuestiones, de las características de este centro y la necesidad de establecer la evidencia científica de las intervenciones psicosociales en el cuidado de las personas con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

 

CVE: En el marco de la Ley de Promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia, se crearon los Centros de Referencia Estatal con el fin de promover en todo el territorio español, la innovación y mejora de la calidad de los recursos dirigidos a un sector determinado de personas en situación de dependencia. De manera más concreta, ¿nos podría explicar en qué consisten estos centros y, especialmente, el que usted dirige?

MIG: Los Centros de Referencia Estatal (CRE), se crean al amparo de esta ley  y como un recurso del Sistema de atención a las personas con algún tipo de dependencia (SAAD). Este tipo de centros considerados de referencia pretenden promover la autonomía personal y la atención y valoración de las personas en situación de dependencia, el intercambio de conocimientos, la formación de profesionales del sector, el asesoramiento y divulgación de las actividades que se realicen y dar una prestación de servicios de calidad. Tienen su ámbito de aplicación en todo el Estado, y son financiados íntegramente por el IMSERSO. En concreto el Centro de Referencia Estatal de atención a personas con enfermedad de Alzheimer y otras demencias es por tanto un recurso de ámbito estatal, especializado en la investigación, análisis, evaluación y conocimiento de las mejores fórmulas para la atención sociosanitaria de las personas con este tipo de patología y la de sus familias cuidadoras , con un enfoque de enlace, foro de encuentro y colaboración con el conjunto de organismos y entidades que dirigen y prestan su atención a esta enfermedad.

 

CVE: ¿Cuáles son los objetivos y funciones principales del CRE de Alzheimer y otras Demencias?

MIG: El objetivo fundamental es conseguir ser referente en modelos de intervención eficaces y que puedan ser considerados buenas prácticas replicables en cualquier tipo de institución, ya sea asociación o entidad pública o privada, centros de día, residencias y en el propio hogar; entre otros objetivos específicos está la formación a familias, a cuidadores y a profesionales que se dediquen a este tipo de enfermedad, el asesoramiento , el establecer foros de encuentro, crear redes de cooperación y alianzas con otras instituciones ,  la investigación en el campo sociosanitario de la atención , y el poner en valor todas las actuaciones desarrolladas en este campo, todo ello constituiría además  la función principal del CRE.

 

CVE: Desde su nacimiento, el CRE Alzheimer ha tenido una clara visión sobre la importancia de las intervenciones psicosociales y el deseo de establecerse como referencia en este campo. ¿Qué tipo de terapias no farmacológicas se implementan con las personas que acuden al Centro, y cuales dan mejores resultados?

MIG: El Centro apostó desde su comienzo por probar e implementar diferentes tipos de terapias no farmacológicas, ya que el equipo multidisciplinar de profesionales que día a día iba creando la atención específica del CRE consideró que no había eficacia demostrada de las mismas y que era un reto importante poder ser referente en modelos de intervención terapeútica en el campo psicosocial. Desde entonces se han puesto en marcha diferentes terapias, como la musicoterapia, la danza movimiento y terapia, reeducación psicomotriz, estimulación cognitiva a través de la wii, terapia asistida con animales, roboterapia, aromaterapia, entre otras. Incluso se ha creado un modelo propio el PACID, en colaboración con la Universidad de Salamanca, sobre itinerarios de estimulación cognitiva. Hasta el momento todos ellos en mayor o menor grado nos demuestran que mejoran la calidad de vida de las personas y la de sus familias, sin embargo estamos aún en fase de experimentación en la mayoría y esperamos tener datos más concretos sobre su eficacia.

 

CVE: El gran reto en el campo de las terapias no farmacológicas sigue siendo el  demostrar que las terapias no farmacológicas “tienen una evidencia científica”. ¿Qué medidas tendría que tomar el sector para conseguir este reto?

MIG: Las medidas son difíciles, pues la demostración de la evidencia en el campo que nos atañe tiene de por sí un montón de dificultades, de momento elegir los grupos de control, poder determinar el “doble ciego”; traducido al lenguaje común, diríamos que cómo es posible dejar a ninguna persona sin una estimulación cognitiva por ejemplo, además no todas las  personas con alzhéimer o con otro tipo de demencia están en la misma fase, ni tienen las mismas circunstancias personales, sociales o  familiares. Es complicado, pero por ello es un reto que debemos conseguir. Las medidas son, trabajar juntos, uniendo recursos y esfuerzos; las asociaciones tiene un gran potencial para poderlo conseguir pues ellos tienen a las personas y a las familias, las universidades y los profesionales tienen el conocimiento científico, juntemos ambos y podremos estar en el camino adecuado. Para ello nuestro Centro debe ser quién coordine y ponga en valor ambas experiencias.

 

CVE: El año pasado la Fundación Reina Sofía y la Fundación Pasqual Maragall impulsaron conjuntamente la iniciativa “Alzheimer Internacional 2011” ( debéis añadir los Ministerios y las asociaciones)y su Centro coordinó el programa sociosanitario de la Cumbre mundial “Global Alzheimer’s Research Summit”, celebrado el pasado septiembre que contó con 1700 asistentes. Este evento logró aunar la investigación básica y clínica con la sociosanitaria, un hecho poco común en este tipo de eventos. En su opinión, ¿qué significó este logro y qué beneficio podrían obtener los afectados por esta enfermedad, de una mayor colaboración entre estos dos campos? 

MIG: Yo creo que significó un antes y un después; es difícil abrirse camino en un mundo de investigación cuando procedes del campo de la atención psicosocial, y más en este tipo de patología dónde la investigación está mucho más centrada en lo básico y clínico. Lo social quedaba para el mundo de las asociaciones. Sin embargo esta Cumbre nos ha demostrado que las asociaciones de alzhéimer están trabajando y muy bien, implantando nuevas terapias, creando modelos de intervención, acreditando su calidad en la atención; ya no es meramente una atención social, es innovación, es asesoramiento y son buenas prácticas, que deben valorarse, evaluarse y demostrar que evidentemente mejoran la calidad de vida de las personas y sus familias. Se vio también que ya había investigaciones hechas y en curso sobre diferentes terapias. El CRE lo que hizo fue localizar y coordinar dónde estaban estas experiencias, y crear redes de colaboración futuras para seguir avanzando en la investigación sociosanitaria de la enfermedad. Los beneficios para las personas afectadas y sus familias, son el presente para mejorar su calidad de vida y puede significar para ellos, el que sean mejor atendidos, el que continúen con sus terapias estén donde estén porque todos hagamos el mismo tipo de actuaciones, esto sería estupendo.

 

CVE: ¿Qué tipo de acciones está llevando a cabo el CRE Alzheimer en el marco del «Año europeo del envejecimiento activo y de la solidaridad intergeneracional»?

MIG: El objetivo del CRE en este año es integrar a las personas con alzhéimer en las actividades socioculturales de su ciudad, para ello se ha presentado una iniciativa llamada “Salamanca ciudad amigable con el alzhéimer” en la cual se contemplan actividades destinadas a facilitar el  acceso a los espacios públicos, a las actividades sociales y culturales de la ciudad, con el fin de que sirvan de terapia para mejorar su calidad de vida. Del mismo modo el CRE colaborará en el proyecto transfronterizo sobre “Envejecimiento activo” dentro del marco de colaboración con la Fundación General de la Universidad de Salamanca y con la  Fundación Reina Sofía.

 

CVE: Teniendo en cuenta el panorama del fenómeno de la población envejecida al que se enfrenta España en estos momentos, ¿qué otros objetivos o retos se plantea el CRE Alzheimer en este campo para el futuro?

MIG: Nuestro reto siempre será el dar la mejor atención, formación y asesoramiento posible a las personas que acudan al centro, a sus familias, a los profesionales e investigadores, a las asociaciones e instituciones  favoreciendo por supuesto todas aquellas iniciativas que consigan que las personas con demencias y sus familias cuidadoras tengan una mejor calidad de vida, que realicen una actividad positiva.

 

CVE: Muchas gracias María Isabel.

Agradecemos mucho a María Isabel González Ingelmo su amabilidad a la hora de responder a esta entrevista, que hemos realizado a través del correo electrónico en abril de 2012.