No sé si les pasa a todos los cuidadores, pero a mí sí. Tengo una especie de síndrome, acostumbrada a actuar continuamente, no sé parar. Acabo creyendo que sin mí, las cosas no van a funcionar. Que si no encontrarán la ropa, que la comida del congelador está sin etiquetar y se harán un lío...